CGT considera que el SMI sigue siendo insuficiente y recuerda al Gobierno “progresista” de Sánchez e Iglesias que no se está cumpliendo con la Carta Social Europea
Según la Carta Social Europea, firmada por el Estado español, el SMI se establece “obligatoriamente” en los 1.113 euros mensuales
CGT señala a las políticas antisociales de los diferentes Gobiernos, a sindicatos del régimen y a la patronal como responsables directos de la pérdida de más de 64.000 millones de euros en rentas del trabajo
La Confederación General del Trabajo (CGT) ha emitido un comunicado en el que marca su postura ante la “subida” del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) llevada a cabo por el nuevo Gobierno de PSOE y Unidas Podemos, calificándola de insuficiente puesto que no se está cumpliendo con lo recogido y firmado por el Estado español en la Carta Social Europea.
Según la organización anarcosindicalista, esta renta establecida por la Carta Social Europea (1.113 euros mensuales) es la que se viene reivindicando por el movimiento de personas pensionistas desde hace más de 4 años. Además, indican desde estas siglas, que nuestro SMI sigue siendo uno de los más bajos de Europa, incidiendo directamente en aquellas personas que peor lo llevan pasando desde comienzos de la crisis-estafa.
CGT ha manifestado que las razones por las que existen tantas diferencias con otros países de la Unión Europea vienen dadas por las políticas antisociales que desde la primera década del S.XXI se vienen ejerciendo desde diferentes Gobiernos, en connivencia con los sindicatos del régimen (CC.OO. y UGT) y la patronal. En este sentido, CGT indica que estas políticas han contribuido a la pérdida de rentas de trabajo por valor de 64.500 millones de euros.
CGT recalca que la clase trabajadora sigue sufriendo una enorme injustica social porque se ha legislado en contra del interés general y a favor del capital, por eso ahora esta “subida” del SMI que el nuevo Gobierno progresista anuncia como un rotundo éxito, viene provocada más por las exigencias del capital, que ha visto sustraídas esas rentas, que por la aspiración de una verdadera mejora para quienes peor lo están pasando.
En CGT no olvidan tampoco la realidad de las personas trabajadoras más jóvenes y la de las mujeres, que son quienes sufren las peores consecuencias. En este sentido, las personas trabajadoras, precarias o empobrecidas, activas o desempleadas, suponen para el Estado 5’4 millones, siendo las más jóvenes las que ocupan el 48% de la tasa de desempleo en nuestro país.
Desde CGT siguen insistiendo en que es posible repartir de otro modo más justo la riqueza para acabar con el empobrecimiento de las personas trabajadoras y las enormes injusticias en materia de derechos fundamentales que se comenten contra ella en beneficio del capital.
CGT recuerda que las promesas electorales en materia de políticas sociales no resuelven la injusticia social, y que solo será en la calle, organizadas y comprometidas con quienes peor lo pasan, desde donde se logrará la restitución de todos aquellos derechos y libertades de los que han ido despojando a la clase trabajadora en los últimos años