Buscar empleo supone casi tanto tiempo como estar empleado. Cuando nos ponemos manos a la obra, no sabemos por donde empezar y nos cuesta activarnos.. Son muchas las tareas que debemos llevar a cabo y se nos va el tiempo casi sin darnos cuenta.
Necesitamos planificar una estrategia eficaz para encontrar trabajo.
Vías para buscar trabajo
Ésta es la pregunta que se hacen muchas personas cuando se encuentran en la situación de buscar empleo porque han perdido el suyo o sienten la necesidad de cambiar el que tienen. Y es que no es tarea fácil. Hoy día las vías por las que podemos buscar trabajo es muy amplia (Portales de empleo, webs corporativas, App´s, Redes Sociales o Profesionales, Agencias de colocación, Redes de contactos, etc …), es por ello que establecer una adecuada organización nos resultará imprescindible.
• Empresas especializadas: Según un Informe de Tendencias en RRHH de Randstad Research, ya en 2018 el 55% de las compañías utilizan empresas especializadas en selección y contratación de profesionales para buscar al candidato deseado, siendo este el canal más utilizado.
• Con el uso tan generalizado de internet, muchas empresas buscan candidatos en los portales de empleo como Infoempleo.com, en las redes sociales, los blogs, etc. Tienes que investigar cuáles existen, qué tipo de ofertas son las que se publican en ellos y cómo darte de alta para poder enviar tu candidatura a aquellas que te interesen. Los utilizan el 41% de las compañías.
Las oficinas de empleo: Éste es el lugar por donde debes comenzar, ya que es donde debes inscribirte como demandante de empleo. No dejes de consultar sus ofertas en papel ni las que publican el Servicio Público de Empleo Estatal en la página web Redtrabaj@ y los servicios públicos de empleo de la Comunidad de Madrid tienen su propio servicio de búsqueda de empleo. Los servicios públicos de empleo solo los usan el 11% de las empresas.
• Las agencias de empleo locales: Éstas dependen del ayuntamiento del municipio en el que vives pero su funcionamiento es muy similar. Ambas ofrecen intermediación y gestión de ofertas y además organizan cursos para desempleados.
• Existen también otros centros pertenecientes a los servicios públicos de empleo que están dirigidos a colectivos concretos. Entre ellos figuran los centros de intermediación laboral, que se dirigen a colectivos en riesgo de exclusión, y los centros especiales de empleo, para personas con discapacidad.
• Las ETT . Ésta puede ser la puerta de entrada en una empresa; Si eres un profesional con una experiencia media puedes dirigirte a las numerosas empresas de selección. Existen también las empresas de cazatalentos o headhunters, que se dedican a la búsqueda de perfiles muy especializados o con mucha experiencia.
• En el caso de que seas titulado universitario o estés terminando la carrera, puedes utilizar los servicios de los COIE (Centros de Orientación e Información para el Empleo) o centros para el empleo localizados en las universidades. En ellos se gestionan ofertas, así como prácticas profesionales en empresas. El contacto con universidades, escuelas de negocio y centros de postgrado son usados por un 36% de las empresas.
• Las fundaciones y asociaciones son un recurso muy útil. Muchas de ellas poseen bolsa de empleo, imparten talleres de nuevas tecnologías y de orientación laboral, organizan cursos de formación ocupacional y de idiomas, incluido el español, y también ofrecen otros servicios como asistencia jurídica y psicológica, ludoteca para niños, etc.
• Otras entidades con bolsa de empleo y cursos de formación ocupacional que tienes que visitar son las cámaras de comercio, los sindicatos, las asociaciones empresariales y los colegios profesionales.
• La autocandidatura, consistente en la localización de las empresas en las que estás interesado y el envío de tu currículum ofreciéndote para trabajar en ellas, es otra opción que tienes que contemplar. Es importante que consigas la mayor información posible acerca de esa empresa, a qué se dedica, dónde se localiza, cuál es la persona de contacto, etc. Es posible que, si en ese momento no hay un puesto acorde a tu perfil, te llamen más adelante cuando surja una oportunidad.
• Las ofertas de prensa, aunque actualmente están siendo desbancadas por los recursos ya citados, son un clásico en la búsqueda de empleo, y se siguen publicando en los suplementos dominicales de los principales periódicos y en la prensa especializada. Solo se utilizan por un 7% de las empresas.
• Mercado Oculto de Trabajo, son los medios por los que las empresas contratan su personal sin publicar las vacantes, y que representan el 75% de las vacantes de empleo como a través de referidos, a través de intermediarios o por contratación directa.
• Por último, otras vías pueden ser la localización de ofertas en los boletines oficiales, los autoanuncios en páginas de internet o prensa, las referencias de empleados, la promoción interna (las usan un 37% de las empresas), las páginas web de las compañías (las usan un 28% de las empresas), las redes sociales (las usan un 21% de las empresas). ferias de empleo (las usan un 5% de las empresas), etc.
Planificación de la búsqueda
La creación de una agenda de búsqueda es una gran herramienta que nos será muy útil ya no solo organizativamente, también nos ayudará a marcar objetivos y ahorrar tiempo.
En cuanto al tipo o el formato de la misma, existe gran variedad; puedes usar la típica agenda en papel, recurrir a una agenda electrónica, mediante hojas de cálculo en un PC o elegir entre una amplia gama de App´s especializadas que resultan verdaderamente eficaces. Deberás elegir la que mejor se adapte a tus hábitos de uso, teniendo en cuenta que tienes que ser capaz de modificarla, ampliarla o reestructurarla según las necesidades que te puedan ir surgiendo.
La agenda puede contener distintos apartados que nos ayuden a clasificar, organizar y planificar:
- Anotación de actividades o plazos: Ya sea con carácter diario, semanal, las iremos repasando para no olvidarnos de por ejemplo el inicio de una feria de empleo, el plazo de inscripción a una bolsa de empleo o determinada convocatoria.
- Registro de candidaturas o autocandidaturas: Anotaremos todos los procesos en los que nos inscribamos y haremos un breve resumen con fechas, condiciones de la oferta y demás observaciones. Así podemos evitar que cuando nos llamen y si ya ha transcurrido algo de tiempo, no recordemos el proceso de selección en cuestión o el puesto al que nos hemos presentado, algo que sin duda crea en el seleccionador una imagen de desorganización o falta de interés.
- Relación de empresas y contactos: Es interesante crear un registro de las empresas y los contactos con los que tratemos en nuestra búsqueda de empleo. En este registro reflejaremos datos como el nombre y dirección de la empresa, el puesto por el que nos interesamos y sus requisitos, fechas en la que se contactó ya sea por teléfono o mediante una entrevista, personas de contacto y vías de comunicación (correo electrónico o teléfono)
En definitiva una adecuada organización en tu búsqueda de empleo te ayudará a obtener una mejor visión de su evolución, valorarla y tomar decisiones para optimizar los resultados.